En los últimos años ha crecido considerablemente el consumo de bebidas vegetales. Se han convertido en una opción frente a las tradicionales de origen animal como la leche.
Así, hay personas que deciden incorporarlas a su alimentación, combinándolas con las de origen animal, o descartando esta últimas por completo.
Otro grupo de personas a tener en cuenta es el de las que eligen bebidas vegetales porque presentan alergias o intolerancia a las bebidas de origen animal.
Te lo cuenta Isabel Campos, nutricionista del Centro Médico Quirónsalud Toledo en pereznoesraton.com, el portal profesional exclusivo de IPDGrupo.com que te ofrece información para decidir sobre salud y bienestar.
Te ayudamos a elegir una bebida vegetal saludable
Pero, ¿cómo elegir una bebida vegetal saludable? Basta seguir tres sencillos pasos:
Escoger (1)
Ten en cuenta tus gustos, para qué la vas a consumir, qué frecuencia de consumo vas a hacer, si hay alguna contraindicación (alergias o intolerancias), e infórmate qué te aporta:
- Soja: la bebida de soja es rica en proteína y la más parecida en composición a la leche de vaca, por lo que es una buena opción para tomar a diario.
- Avena: la bebida de avena es rica en proteína, en hidratos de carbono y fibra, ya que suele llevar un porcentaje bastante bueno de avena. Una buena opción para tomar a diario como la de soja.
- Arroz: la bebida de arroz es la que aporta más hidratos de carbono y menos proteínas. Además, la cantidad de fibra es bastante menor que la que encontramos en la bebida de avena. Además, al existir una alerta sanitaria acerca del contenido de arsénico inorgánico en el arroz, mi recomendación es consumir muy esporádicamente.
- Almendra: la bebida de almendra es muy baja en proteína y, por lo general, suelen tener muy bajo porcentaje de almendra, por lo que sólo la recomiendo para consumos más esporádicos, o para situaciones en las que no consumimos leche o bebida de avena o soja, y como alternativa a la bebida de arroz en caso de celiaquía.
- Coco: la bebida de coco cuenta con bajo contenido en hidratos y proteína. Suele venir complementada con bebida de arroz, para darle más cuerpo y endulzarla, así que mejor si no la lleva. Se puede consumir más esporádicamente o usar para postres.
Comparar (2)
Una vez escogido el tipo de bebida es importante comparar entre diferentes opciones. Para ello, es importante leer el listado de ingredientes, fijarse y comparar entre las diferentes bebidas, teniendo en cuenta estos tres puntos:
- Que tenga un alto porcentaje de producto (cereal, legumbre o fruto seco): En la lista de ingredientes debe aparecer como primer ingrediente el del producto principal. Busca una bebida que contenga más de 10% de producto (soja, avena, almendra, etc.)
- Que no lleve azúcar añadido: Los nombres del azúcar añadido son muchos, así que evita y sospecha si lees palabras como jarabe, fructosa, sacarosa o dextrosa.
- Que esté enriquecida: Sobre todo en calcio, vitamina D y/o B12.
Revisar (3)
Si llevan estabilizantes (goma gelana, gellan o garrofín), aromas o sal marina.
También suelen contener aceite de girasol o colza. En este caso, si es de producción ecológica, el prensado de estos aceites sería en frío, y de mejor calidad.
Lo preferible es que cuantos menos ingredientes tenga, mejor producto será, pero si es la única opción que encuentras y cumple con las condiciones del punto 2, puede ser una opción para barajar.