¡Di adiós a la pérdida de orina! Afortunadamente, se puede mejorar o corregir. Es hora de desterrar el falso bulo de que es normal, de que hay que acostumbrarse y de que no tiene solución.
Además, no es algo de lo que nos debamos avergonzar, ya que es un problema muy común, sobre todo en mujeres.
Todo esto provoca que la incontinencia urinaria no sea diagnosticada como debería, a pesar de que existen tratamientos y medidas para un mejor control.
Buscamos las pautas para aliviar la incontinencia urinaria con el doctor Alberto Lanzón Laga, especialista en Ginecología y Obstetricia del Hospital Quirónsalud Zaragoza.
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¡Di adiós a la pérdida de orina!
La incontinencia urinaria se manifiesta como una pérdida involuntaria de orina. El porcentaje de mujeres afectadas entre 50 y 70 años es del 30-40%, y es menos frecuente por debajo de esa edad (10% de los casos).
Hay que destacar que la incontinencia urinaria es un problema muy común entre las mujeres, especialmente después de la menopausia.
Entre la vergüenza y la menopausia
A pesar de que afecta a la calidad de vida, no está lo suficientemente diagnosticada y tratada, e incluso está infravalorada. Esto se debe, por un lado, a la vergüenza o incomodidad que provoca en algunas personas el hecho de exponerlo a los especialistas.
En otros casos, se percibe como algo normal y fisiológico relacionado con la menopausia, por lo que tampoco se acude a consulta.
Tipos de incontinencia urinaria
- Incontinencia de esfuerzo. Esta pérdida de orina coincide con un incremento de la presión en el abdomen producida por la actividad física.
- Incontinencia de urgencia-vejiga hiperactiva. Se relaciona con unas intensas ganas de orinar y que suelen acompañarse de una mayor frecuencia por el día y la noche.
- Mixta. Se presentan síntomas tanto de esfuerzo como de urgencia urinaria.
Factores de riesgo
- Parto vaginal. Cobra importancia el número de partos, la duración y el peso del bebé
- Edad. Puede causar el desgaste de tejidos
- Obesidad o sobrepeso
- Trabajos que exigen un mayor esfuerzo físico
- Deportes de impacto
- Enfermedades respiratorias crónicas
- Medicación. Antihipertensivos, diuréticos o antidepresivos
- Prolapso de órganos pélvicos
- Antecedentes en la familia
Diagnóstico de la incontinencia urinaria
Es necesario realizar una historia clínica y una exploración física de forma detallada. De esta manera, podemos:
- conocer si hay factores que predisponen a la incontinencia urinaria
- objetivar y cuantificar la pérdida de orina
- valorar cómo afecta a la calidad de vida
- así como descartar otros problemas ginecológicos o urológicos relacionados
Igualmente, el diagnóstico de la incontinencia urinaria permite valorar la necesidad de otros estudios adicionales, así como indicar los tratamientos adecuados para cada caso.
Recomendaciones para mejorar la pérdida de orina
Los síntomas de incontinencia urinaria se pueden minimizar o corregir con estas pautas y tratamientos:
Mantener una alimentación equilibrada (1)
Es importante seguir dietas equilibradas, teniendo en cuenta que se ha evidenciado que el sobrepeso es un factor de riesgo independiente para este problema urinario.
Evitar alimentos y bebidas con irritantes para la vejiga (2)
Es recomendable no beber líquidos que contengan gas, cafeína o teína, y también se debe evitar el consumo de chocolate o comidas con demasiado picante.
Prestar atención al consumo de alimentos diuréticos, que provocan una mayor producción de orina (3)
Por ejemplo, la sandía, el melón, las ensaladas, los espárragos o el alcohol causan ese efecto diurético.
Reeducar la vejiga y otros hábitos (4)
Existen ejercicios vesicales que ayudan a aprender buenos hábitos, así como a entrenar zona de la vejiga. Además, es importante evitar malas conductas relacionadas con la micción.
Fortalecer el suelo pélvico (5)
Los ejercicios de Kegel para la musculatura pélvica pueden mejorar hasta en un 60% la incontinencia urinaria.
Establecer un tratamiento médico (6)
Se utiliza para tratar la incontinencia de urgencia y requiere la toma de un comprimido cada día. Su eficacia es del 40-60%.
Tratar la atrofia urogenital (7)
El tratamiento consiste en aplicar geles vaginales que incluyen estrógenos.
Operar en determinados casos (8)
Si se trata de incontinencias de esfuerzo, se puede indicar el tratamiento quirúrgico con mallas suburetrales libres de tensión. Con esta cirugía se obtiene un alto índice de mejoría y de curación, entre el 85-90%.
La incontinencia urinaria es muy común. Es importante dejar de lado la vergüenza y consultar con el o la especialista en Ginecología. Un alto porcentaje de casos de pérdida de orina se puede mejorar o corregir. De esta forma, mejorará de forma significativa nuestra calidad de vida.
